sábado, 25 de febrero de 2023

CAMINO DE LA FÁBRICA

Hace unos días participamos en la conversación del grupo de Facebook “Nun yes de Muros” indicando por donde discurría el Camino de la Fábrica. En esta entrada queremos exponer los datos que en el pasado utilizamos para situar el topónimo “La Fábrica”, así como dejar documentado el resto de información que ha ido apareciendo al respecto.

En la realización del Mapa de la Toponimia Menor de Muros de Nalón encontramos un lugar denominado “La Fábrica” en varios documentos de propiedad de principios del siglo XX: 

1.    Por un lado, existían en los años 40 dos fincas llamadas “La Fábrica”, pertenecientes a la familia de Manuel Fidalgo y Asunción Alonso.

2.  Por otro lado, también hay referencias al “Camino de la Fábrica” como lindero de fincas particulares. Con ese nombre se alude al camino público que desde La Veiga sube a mitad de la Cuesta Arango, discurriendo por detrás de Quintana y de los bloques de El Parador.


Durante las entrevistas para la realización del mapa fueron tres los informantes de la zona de Era y Quintana que reconocieron el nombre de “La Fábrica” en la zona de La Veiga donde convergen hasta cuatro caminos: el que sube en dirección Norte a la Plaza, el que va en dirección Oeste hacia Arroñadas/Roñadas, el que parte en dirección Sur conocido como Camín Real de Riomayor, y el que baja en dirección a El Pontigo/Pontíu.

Aunque la cartografía catastral contiene muchos errores en los nombres de las fincas, en este caso particular la denominación de las fincas es correcta. Así las parcelas catastrales 68 y 69 del polígono 7 de Muros de Nalón tienen la denominación de La Fábrica.


Se trata de una vaguada con una fuerte pendiente, por la que baja el arroyo que nace del lado de abajo del Casino de Muros, y que cruza la antigua carretera Nacional por debajo de “El Alcantarillón”. Ninguno de los tres informantes en aquel momento pudo precisar el motivo que originó el nombre de La Fábrica y tan solo uno de ellos (Fermín Murias de Quintana) nos pudo indicar que:

“en el fondo, había una barrera donde hacían barro y todas esas cosas… y ladrillos me parez que era… Acuérdome yo de rapacín ver todavía los ladrillos allí y esas cosas”.

Lógicamente, el hecho de que una zona se llame La Fábrica no quiere decir que haya habido una gran factoría, pero sí que pueda haber existido una pequeña actividad industrial. Según la RAE, fábrica, del latín FABRICAM “taller”, es un establecimiento dotado de la maquinaria, herramienta e instalaciones necesarias para la fabricación de ciertos objetos, obtención de determinados productos o transformación industrial de una fuente de energía.

En los recientes comentarios del grupo de Facebook “Nun yes de Muros” ha aparecido el testimonio de Juan Carlos García que, pese a ser menor de 50 años, atesora información al respecto obtenida por transmisión oral directa de su abuela. Carmina “la de Norte” nació en La Veiga en 1916, con lo que cumpliría a día de hoy 107 años. Toda su vida vivió y trabajó en su casería de La Veiga, por lo que era perfecta conocedora de la zona. Aunque lamentablemente no podemos contar hoy en día con su testimonio directo, sí podemos dejar constancia de lo que le transmitió a su nieto. Comenta Juan Carlos que La Fábrica estaba vinculada a un aprovechamiento hidroeléctrico, que era conocido por su abuela como “La Belmontina”.

En un primer momento podríamos pensar que en esa zona de La Veiga hubiera existido una pequeña fábrica de luz, aprovechando la energía cinética del arroyo que pasa por ella. Sin embargo, el hecho de que Carmina la denominara “La Belmontina” nos abre otra hipótesis aún sin confirmar. Sabemos por las investigaciones de Armando Grande que en 1902 se tramitó por la “Eléctrica La Murense” ante el Ayuntamiento de Muros de Nalón la licencia de la conducción para llevar agua dulce de La Reguera en La Pumariega a la fábrica de La Portilla. Por ello lanzamos aquí la posibilidad de si en “La Fábrica” de La Veiga se hubiera estado también recogiendo agua para encauzarla hasta La Portilla.

Durante la conversación del grupo de Facebook, además de hablar acerca de la fábrica, han aparecido testimonios de vecinos de El Parador y Quintana que denominaban al “Camino de La Fábrica” como “La Caleona”, topónimo formado como aumentativo de calea/caleya; para el origen de esta última denominación suele admitirse un diminutivo del latín CALLEM “calle”, esto es *CALLICULAM “calle pequeña” (García Arias, p. 720). El nombre “Caleona” suele aparecer en trazas de caminos antiguos, lo cual encajaría perfectamente con la consideración de dicho camino como el Camín Real de Santianes, al tratarse del camino más directo para llegar a La Plaza desde el límite del municipio en El Pontíu/Pontigo.

 


A día de hoy no existen certezas sobre el motivo exacto del topónimo “La Fábrica”. Sin embargo, confiamos que en el futuro aparecerá documentación histórica que aporte información sobre la actividad que dio tal nombre a esa zona. Se confirmaría entonces, una vez más, que redescubriríamos una parte de la historia del concejo gracias a lo que nos indican los nombres de los lugares.

 Javier García Alonso - Juan José García González


Bibliografía:


Camino a la antigua fábrica del Pontigo. Nun yes de Muros de Nalon si … Facebook. https://www.facebook.com/groups/316024188553512/permalink/2443955419093701/

Cédulas de la Propiedad de la Riqueza Rústica de Muros de Nalón. Archivo Histórico de Asturias.

García Alonso, Javier, Mapa de la Toponimia Menor del concejo de Muros de Nalón, Muros de Nalón, 2022.

García Arias, Xosé Lluis, Toponimia asturiana. El porqué de los nombres de nuestros pueblos, Editorial Prensa Asturiana, S. A., Oviedo, 2005

Grande Roca, Armando. Concejo de Muros. Su historia. Periodo de 1936 a 1975. Armando Grande Roca, 2009.

Página web de la Dirección General del Catastro.

Página web de la Real Academia Española (RAE)

 


sábado, 11 de febrero de 2023

TOPONIMIA EN LOS ALREDEDORES DE "EL CAMPÓN"

En la entrada anterior describimos las características del castro de El Campón como recinto de interés arqueológico en el que vivían antiguos pobladores de nuestro territorio. Sin embargo, estos habrían de realizar actividades en zonas cercanas al mismo, por lo que el ámbito de influencia del castro traspasaba sus propias líneas defensivas.

El gran estudioso de los castros asturianos Jose Manuel González y Fernández-Vallés, filólogo de formación y arqueólogo de corazón, descubrió y catalogó gran cantidad de castros gracias a topónimos que se repiten abundantemente en diversos lugares de Asturias. Por ello la toponimia, y sobre manera la toponimia menor, es una gran fuente de información para la arqueología.


Hagamos, pues, un repaso a otros topónimos cercanos que pueden tener relación con dicho poblamiento castreño.


Veneiro y Veneirín

A los pies del promontorio del castro se encuentran las playas de Veneiro y Veneirín, la segunda con una forma asturiana de diminutivo de la primera. Ya dijimos que el nombre de estas playas procede de la voz latina VENARIUM, formada a partir de VENA, “filón [de un metal]” con el sufijo –ARIUM, que indica “lugar abundante en algo”. Alude el topónimo claramente a la explotación minera situada junto a la playa; de ella, en época prerromana o romana, extraían los pobladores del castro muy posiblemente cobre y/o hierro (a juzgar por la presencia en la zona de un tipo de mineral denominado goethita, en el que dos tercios de su composición son de hierro). Hay noticias de que todavía hacia mediados del siglo XX se produjo un aprovechamiento mineral de este yacimiento.

Una denominación alternativa a la tradicional de Veneiro es la de Playa de Xilo, mucho más moderna, aunque se remonte ya a algo más de un siglo. Efectivamente, en agosto de 1913 fueron localizados en una cueva de la playa los restos descuartizados de “Xilo el Hilario”, sobrenombre de Hermenegildo Álvarez Barrera, labrador adinerado de Muros, con domicilio en Reborio, asesinado a la edad de 70 años. Se localizó primero su cuerpo sin cabeza ni piernas dentro de un saco y luego se encontraron sus piernas; también aparecieron en la misma playa algunas de sus ropas. El asesinato de Xilo, como cuentan Mancisidor-Cándano, provocó una enorme conmoción en Muros. El móvil del crimen fue el robo. Hubo muchos interrogatorios, sospechosos e incluso encarcelados, pero finalmente el caso se cerró sin acusados y nunca fue esclarecido. El recuerdo de tan macabro suceso se mantiene, no obstante, en el “nuevo” nombre de la playa.

 

El Castiellu

Por su situación y topografía, El Castiellu ha sido un lugar relevante en la historia de Muros. El nombre de esta gran peña, que limita imponente la playa de Aguilar por su parte oriental, remonta al latín CASTELLUM, origen también del término castellano “castillo”, y que puede referirse a la existencia de construcciones de uso defensivo. El mismo Félix Fierro (pág. 22) apunta a propósito de este lugar lo siguiente: “se halla, en su mayor parte, revestida ya de vegetación y puede ascenderse por ella cómodamente, hasta ver en lo alto las ruinas de una edificación que, sin duda, fue la que le dio nombre”.

 

Los Corrales

Muy cerca del castro encontramos también el topónimo Los Corrales. El Diccionario de la RAE define la voz corral de esta manera: “En las casas o en el campo, sitio cerrado y descubierto que sirve habitualmente para guardar animales” y propone que el término pueda proceder del latín vulgar *CURRALE “lugar donde se guarda el carro”, derivado este de CURRUS “carro”. Podrían muy bien haber existido en este lugar estructuras o recintos dedicados a la explotación ganadera desde épocas ciertamente antiguas.

  

El Miradorio

Otro topónimo cercano y posiblemente vinculado al castro es El Miradorio, del latín MIRARI “admirar”, que el Diccionariu de la Llingua Asturiana define como “Sitiu dende onde se mira un paisaxe”. Topográficamente El Miradorio está situado en una cota superior al castro, por lo que podría haber sido utilizado como lugar de vigilancia.


La Carcavina

Este topónimo es diminutivo de la palabra castellana cárcava, con variantes cárcova y carcua. De este término surgen topónimos bastante frecuentes en Asturias como La Cárcava, La Carcavada y este mismo nuestro de La Carcavina, que existe también en el concejo vecino de Soto del Barco. Según el Diccionario de la RAE, cárcova es una “zanja o foso”. Este tipo de zanjas se utilizaban muchas veces para marcar los límites de fincas o montes. No es fácil determinar si este recurso de demarcación del territorio se remonta a los tiempos de ocupación del castro o es posterior, pero es sin duda un uso con muchos siglos de antigüedad.


Juan José García González – Javier García Alonso

 

Bibliografía:

 

González-Fierro, Félix, Muros de Nalón, Oviedo, Instituto de Estudios Asturianos, 1953.

García Arias, Xosé Lluis, Diccionariu xeneral de la llingua asturiana, Oviedo, Academia de la Llingua Asturiana, 2002

García Arias, Xosé Lluis, Toponimia asturiana. El porqué de los nombres de nuestros pueblos, Editorial Prensa Asturiana, S. A., Oviedo, 2005

Mancisidor, Myriam – Cándano, Xuan, “Xilo, un asesinato sin pies ni cabeza”, La Ilustración Asturiana, segunda época, nº 12, invierno de 2004, pág. 7.


EL JARDÍN Y LA CAPILLA DE SANTA EULALIA DE MÉRIDA

En la entrada anterior de nuestro blog (27 de abril de 2024) recorríamos en el tiempo el proceso que hizo del Campo del Palacio un espacio p...